La mala praxis médica tiene lugar en el momento en el que el médico lleva a cabo una actuación o toma una decisión que no se adapta a las reglas que estructuran la práctica de la medicina, y como consecuencia de ello se produce un resultado dañoso para el paciente, que tendrá que ser valorado y cuantificado.
Ante situaciones como esta, en la que creemos haber sido víctima de una negligencia o mala praxis médica es muy importante la elaboración de un buen informe pericial que cuantifique el daño que se ha producido y las eventuales secuelas que pueden surgir en el paciente tras la negligente intervención.
El Informe pericial de perito especialista debe plasmar un resumen completo y fidedigno de la historia clínica del paciente, una cuantificación de los días de hospitalización, de los días impeditivos, los días no impeditivos y las secuelas funcionales o estéticas que le hubieran podido quedar a la persona afectada tras una negligente intervención. Todo ello según los puntos del baremo que contiene la ley y convertido a continuación en la cantidad de euros correspondiente.
Los daños causados que pueden ser tenidos en cuenta para indemnizar son principalmente las lesiones permanentes, entendidas como las secuelas reales o lesiones ya estabilizadas, las incapacidades temporales, entendidas como el tiempo en que ha tardado en curar o estabilizar las lesiones provocadas por el error médico y los daños morales.
En Campo & Cavia Abogados contamos con un equipo de abogados expertos en negligencias médicas y mala praxis que estarán a tu lado en todo momento para asesorarte a la hora de comenzar una reclamación de este tipo.
Campo & Cavia Abogados.
Departamento de Negligencias Médicas.