Si una persona sufre una negligencia médica y está dispuesta a reclamar, tiene que tener presente que no va a ser un camino de rosas, y que los médicos o profesionales sanitarios que han cometido la mala praxis, van a poner todos los obstáculos posibles para que la reclamación fracase.
El presente artículo no es más que una reflexión un un abogado que lleva ya más de diez años reclamando indemnizaciones por negligencia médica. Tanto dirigidas a la sanidad pública como a la sanidad privada. En todas ellas, existe un denominador común, y es el intento por parte de los médicos o profesionales sanitarios que han cometido la negligencia, de escurrir o difuminar su responsabilidad amparándose en que su actuación es la misma que hubiera realizado cualquier otro profesional sanitario en su lugar.
De la misma forma, en los propios historiales médicos pueden dejar de reflejar aspectos importantes que determinarían una actuación incorrecta y que sin embargo al no existir en los mismos hace mucho más difícil su acreditación.
En definitiva, ningún responsable de mala praxis va a poner el camino fácil y hay que saber exactamente cuál es la forma de desvirtuar sus informes o bien de demostrar que su actuación no fue la adecuada para un profesional sanitario.
Lógicamente el historial médico no es lo único que se tiene en cuenta, ya que por lo general una vez se ha comedido la negligencia, el perjudicado cambia de profesional médico y por lo tanto hay un nuevo seguimiento con unas secuelas que haya podido dejar la mala praxis que antes no existían. Será entonces el causante de la mala praxis quien tendrá que justificar el motivo por el que estos nuevos daños o padecimientos que antes no tenía el paciente, los tiene ahora.
Con independencia de la dificultad de la reclamación, es evidente que hay que ponerse en manos de buenos especialistas en negligencias médicas, los cuales remitirán al paciente de inmediato a un perito que valore la actuación profesional así como su viabilidad judicial para poder presentar una reclamación motivada.
Sin el informe favorable de un perito médico especializado, la reclamación está llamada al fracaso. Sólo dicho informe que da el semáforo verde a la reclamación, nos garantizará que podemos reclamar con ciertas garantías.
Campo & Cavia Abogados
Departamento Negligencias Médicas