Cuando un paciente sufre una negligencia médica, se enfrenta a un proceso que para nada es fácil ni sencillo. Se va a enfrentar a un sistema público o privado de sanidad que se autoprotege y para el que habrá que estar muy bien preparado para salir con éxito.
Y es que una vez se inicia la reclamación mediante el correspondiente proceso, todo son obstáculos e impedimentos para que se pueda tener una respuesta ágil y rápida. Si se reclama contra la sanidad pública, los plazos todavía se alargan más y los Juzgados funcionan más lentos si cabe.
Y si se reclama ante la sanidad privada, a pesar de que el proceso es más ágil, hay que mencionar que nos enfrentamos contra las compañías aseguradoras que cubren el riesgo de médicos, hospitales y resto del personal sanitario que puede causar una negligencia indemnizable.
Pues bien, podría dar una gran lista de reflexiones y consejos para comenzar una reclamación por negligencia médica. La lista sería interminable, pero quizás puedo apuntar alguna reflexión que pueda ser de utilidad a alguna persona que se haya visto perjudicada por una mala praxis médica y quiera iniciar el proceso de reclamación.
- Si los datos producidos no son considerables, hay que pensarse bien la reclamación, ya que en ocasiones puede salir más caro el coste del proceso que lo que realmente se va a conseguir tras la reclamación.
- Si realmente quieres tener posibilidades de éxito en tu reclamación, busca no sólo un abogado especializado en estas materias tan específicas. El abogado te pondrá en contacto con médicos que también son especialistas en este tipo de reclamaciones.
- Y dentro de los peritos médicos que defenderán nuestra reclamación, no todos están capacitados para emitir informes sobre negligencia. Se requiere un perito que tenga experiencia en pruebas periciales, y ademas que tenga titulación en la especialidad en la que se haya cometido una negligencia.
- Lógicamente puede presentarse una reclamación sin perito o incluso si es una reclamación administrativa sin abogado, pero en dicho caso, el paciente puede quedarse sentado años y años esperando, ya que la administración o bien el centro médico privado, no contestarán o darán evasivas al paciente, lo que hará que acabe en la desesperación y acabe renunciando a su derecho a la reclamación.
En definitiva, si te han causado serios perjuicios por una negligencia médica, tienes todo el derecho del mundo a ser indemnizado, pero hazlo rodeado de profesionales expertos para evitar que una mala actuación jurídica o médica, te prive de una compensación que te corresponde en un proceso por la mala praxis cometida.
Campo & Cavia Abogados
Departamento Negligencias médicas