El plan de parentalidad
Coparentalidad no significa que se divida el tiempo al 50%. Cada etapa de un niño/a, sus necesidades especiales, la idiosincrasia familiar, y un largo etcétera determinarán cómo los padres deberán distribuir el tiempo que pasan con sus hijos y cómo van a cuidar de ellos.
Con un buen plan de parentalidad, los padres se comunican información importante y colaboran, establecen principios de respeto; los niños mantienen una relación continuada con ambos, reciben el cuidado médico adecuado, no dejan de participar en actividades con amigos, no pierden el contacto con sus abuelos ni hermanos, no son los mensajeros de los padres.
El plan de parentalidad sitúa por delante las necesidades de los hijos y lanza una llamada a la madurez de los padres. Es necesario promover la democrática cultura del diálogo y acuerdo para gestionar conflictos y visualizar cómo será el nuevo futuro de todos. En especial, de los más pequeños para que no sufran. O dejen de sufrir cuanto padecían hasta ahora en el proceso de declive generado por el desamor.
Los estudios rigurosos dedicados a los efectos del divorcio en los niños muestran que el conflicto personal continuado, la discordia y la infelicidad de los padres se correlacionan con un peor ajuste emocional en los hijos. La nueva ley catalana reconoce que las separaciones y divorcios no son simplemente procesos legales, sino también emocionales y psicológicos, y como tales requieren intervenciones de la psicología, terapia familiar, la psiquiatría y la mediación. El divorcio ya no queda en manos exclusivas de los juristas y se favorece la colaboración interprofesional entre abogados y psicólogos.
Priorizar la intervención en aquellos padres que dedican mucha energía a pelearse, se centran en sus necesidades y olvidan las de sus hijos es fundamental.
En Campo & Cavia Abogados contamos con un equipo de abogados expertos en divorcios que te asesorarán en todo momento a la hora de iniciar un procedimiento de este tipo.
Campo & Cavia Abogados
Departamento de Derecho Matrimonial